Museus de
Sitges ha encargado al arqueólogo Joan García-Targa el estudio y recopilación
de los fondos patrimoniales de origen sitgetano que en la actualidad están
dispersos por diversos museos y depósitos arqueológicos de Catalunya. El
objetivo es ampliar la información existente y preparar una exposición
permanente en la que se pueda mostrar diversos tipos de materiales que
testimonien los fundamentos históricos de Sitges.
La búsqueda,
conservación y difusión del patrimonio arqueológico de Sitges se ha
intensificado en los últimos años a raíz de las obras de rehabilitación de los
Museus de Sitges. El último ejemplo es la apertura de una zanja en la calle
Fonollar para que lleguen las acometidas de servicios a todos los edificios
reformados, que ha permitido detectar y documentar los pocos restos
arqueológicos que se conservan entre el actual pavimento y la roca calcárea
sobre la que se asienta el núcleo antiguo de la localidad. La primera fase de
los trabajos la ha supervisado el propio García-Targa, mientras que los
cincuenta metros que todavía quedan por excavar están siendo controlados por
Pere Izquierdo, arqueólogo y técnico de proyectos del Consorci del Patrimoni de
Sitges.
Los hallazgos
realizados hasta ahora confirman que Sitges tiene un pasado que se remonta
ininterrumpidamente a la época ibérica, muy anterior a la llegada de los
romanos. Hasta ahora, esto solo se podía afirmar gracias a los silos (sitges) aparecidos, en el Arxiu
Municipal (1988) y en el Ayuntamiento (2001-2002), y a algunos hallazgos de
cerámica. Ahora, por primera vez, también se ha constatado en base a
construcciones de una cierta envergadura.
Precisamente,
el último descubrimiento es el de unos posibles restos de silos (sitges) antiguos cavados en la roca, que
se han localizado bajo el mar, justo enfrente del baluarte de la Torreta. Los
primeros indicios apuntan a que se trataría de instalaciones que originalmente
estaban en tierra firme, pero que, con el paso de los años, quedaron sumergidas
en el agua. Esto podría ser consecuencia de la subida que ha experimentado el
nivel del mar desde la protohistoria, los movimientos tectónicos y de
subsidencia, o una caída de alguna cornisa de roca entera.
Sea lo que sea,
los hallazgos de los últimos años mantienen más abierta que nunca la
posibilidad de que Sitges sea la heredera de la antigua Subur. Una
consideración habitual, aunque no fundamentada todavía a nivel arqueológico. La
única constancia que tenemos a día de hoy es que Subur era una población
catalana de la época romana situada entre Barcino y Tarraco.
Enjoy Sitges
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