Las temperaturas van subiendo,
los planes de des confinamiento van llegando, parece que el número de contagios
va disminuyendo y el buen tiempo, con la primavera avanzando será un aliado en
la lucha contra el dichoso virus, por eso, pese a que ahora mismo por motivos y
razones de seguridad están cerradas, ya hay mucha gente esperando poder
disfrutar de las playas, ya que, cuando uno habla de Sitges, una de las
primeras cosas que le vienen a la cabeza son precisamente sus playas. En poco
espacio de costa, en relativamente pocos quilómetros, podemos encontrar
diferentes tipos de playa separadas por espigones de piedra.
Por tanto, dependiendo de los gustos
de cada uno y de lo que permita las nuevas medidas de distancia social, podemos
escoger tomar el sol de una forma distinta, o con movimiento en las playas del
centro de Sitges (Bassa Rodona o Ribera), relajadamente en la zona del Vinyet
(Barra o Terramar), jugando a vóley bajo la iglesia (Fragata) o por qué no,
hacerlo sin ropa en alguna de las calas más alejadas del centro (Balmins o Home
Mort). También de lugares con historia como la playa de Garraf con sus casetas, o incluso de metros de dunas naturales en les Botigues.
También es cierto que la tormenta
Gloria (con el Covid parece que fue hace mucho tiempo) y el calentamiento
global, el espacio de arena se ha visto reducido considerablemente, pero por el
contrario, el respiro que le ha dado a la naturaleza el propio confinamiento ha
hecho que la biodiversidad y las especies naturales hayan tomado el camino
natural que le pertenece a la naturaleza, la regeneración de la vida.
En resumen, estamos deseando
poder volver a disfrutar de Sitges y sus playas. ¿Quién se apuntará? Por descontado,
si no os gusta tomar el sol, siempre os quedarán los puertos deportivos para
pasear, el Paseo Marítimo y, también, de nuevo la propia playa para dar un
paseo por la arena al anochecer…
Enjoy Sitges!
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